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Most of the stories in the collection are no longer than a paragraph, and some consist of a single sentence. At once allegorical and didactic, these microstories are populated by strange humans as well as anthropomorphic animals, natural elements, and all kinds of human creations. In contrast to more traditional fables, these stories involve dark messages and secrets that are difficult to identify and provoke a sense of strangeness—but others are surprising in their clarity and precision.
Los dientes del peine es una excéntrica compilación de microrelatos o minicuentos escritos por el autor sirio, radicado en Estados Unidos, Osama Alomar. La extensión de la mayor parte de ellos no rebasa un párrafo, y muchos consisten en una sola frase. A la vez alegóricos y didácticos, estos breves relatos están protagonizados lo mismo por extraños humanos que por animales antropomórficos (serpientes, lobos, ovejas), elementos naturales (pantanos, lagos, arcoiris, árboles) y creaciones humanas (camiones, espadas, ceros). Muchos de estos cuentos, al revés de las fábulas más tradicionales, encierran de pronto mensajes y secretos oscuros, difíciles de identificar, que provocan en el lector una sensación de extrañeza. Otros son transparentes y sorprenden por su economía de medios, por la concisión con que exponen una idea.
Los dientes del peine es una excéntrica compilación de microrelatos o minicuentos escritos por el autor sirio, radicado en Estados Unidos, Osama Alomar. La extensión de la mayor parte de ellos no rebasa un párrafo, y muchos consisten en una sola frase. A la vez alegóricos y didácticos, estos breves relatos están protagonizados lo mismo por extraños humanos que por animales antropomórficos (serpientes, lobos, ovejas), elementos naturales (pantanos, lagos, arcoiris, árboles) y creaciones humanas (camiones, espadas, ceros). Muchos de estos cuentos, al revés de las fábulas más tradicionales, encierran de pronto mensajes y secretos oscuros, difíciles de identificar, que provocan en el lector una sensación de extrañeza. Otros son transparentes y sorprenden por su economía de medios, por la concisión con que exponen una idea.
