En este revolucionario libro, Michael Pollan, uno de los escritores más brillantes, originales y elocuentes de Estados Unidos, aborda la aparentemente sencilla pregunta de qué deberíamos comer, ofreciéndonos unas respuestas que tienen profundas implicaciones políticas, económicas, psicológicas e incluso morales para todos nosotros.
¿Qué cenaremos hoy?
Nos hemos confrontado a esta pregunta desde que el hombre descubrió el fuego, pero para Michael Pollan la manera en que la abordamos hoy en día podría llegar a determinar nuestra supervivencia en cuanto a especie.
El hecho de que seamos omnívoros y podamos ingerir todo tipo de alimentos hace que nuestro acto de decidir qué queremos comer se vuelva un dilema, sobre todo ante la abundancia de productos que nos ofrece el desconcertante y traicionero mercado alimenticio. Cuando escogemos nuestro tipo de alimentación, no solamente entra en juego la salud propia o la de nuestros hijos, sino la de todo el medioambiente.
Escrito de manera excelente y profusamente argumentado, El dilema del omnívoro promete cambiar nuestra percepción sobre las políticas alimenticias y el placer de la comida.
ENGLISH DESCRIPTION
One of the New York Times Book Review's Ten Best Books of the Year
Winner of the James Beard Award
Author of How to Change Your Mind and the #1 New York Times Bestsellers In Defense of Food and Food Rules
What should we have for dinner? Ten years ago, Michael Pollan confronted us with this seemingly simple question and, with The Omnivore’s Dilemma, his brilliant and eye-opening exploration of our food choices, demonstrated that how we answer it today may determine not only our health but our survival as a species. In the years since, Pollan’s revolutionary examination has changed the way Americans think about food. Bringing wide attention to the little-known but vitally important dimensions of food and agriculture in America, Pollan launched a national conversation about what we eat and the profound consequences that even the simplest everyday food choices have on both ourselves and the natural world. Ten years later, The Omnivore’s Dilemma continues to transform the way Americans think about the politics, perils, and pleasures of eating.